Garabito es un vino largo y fresco con un enorme potencial de guarda. Está elaborado por la Bodega Celme, situada en Astariz (Castrelo de Miño).

Es un vino que viene de unas cepas de 15 años de antigüedad. Una vez realizada la vendimia, dejan las uvas en depósitos de INOX, donde arranca la fermentación a temperatura controlada con levaduras autóctonas. Es a mitad de la fermentación, cuando se pasa a barrica de roble francés de primer año en la que reposa con sus lías durante 4 meses.

Una vez terminado este período, se vuelve a traspasar en un depósito INOX durante 2 meses más, sobre sus lías. Y por último, se embotella y se deja reposar durante 12 meses antes de su comercialización.

Garabito es un vino que predomina la fruta, pero que multiplica su intensidad y complejidad mediante suaves notas provenientes de la madera.

Es un vino espectacular, fresco, con buena entrada en boca. Perfecto para acompañar con un buen pescado, arroces o de aperitivo.

Os dejo unas palabras textuales de los culpables de elaborar estos vinos tan ricos:

“Celme Garabito pretende ser una fiel expresión nuestro terruño e de nuestras variedades con los matices y complejidad añadida que le da un breve paso por barrica. El resultado es un vino complejo y de gran potencial de guarda, donde la presencia de notas frutales y florales se complementa con suaves aromas secundarios procedentes de la madeira”.

– Jorge y Dori.